Cuando todo a mi alrededor se queda congelado, quieto, petrificado.
Mi mente a mil revoluciones recorre todos los caminos probables.
Me siento agotado por estar pensadote toda la noche, por buscarte durante todo el día.
Mi piel se resquebraja y se tensa.
Mis ojos, ya perdidos, están abiertos, pero no ven más allá de mi piel adentro.
Camino, camino, camino y camino todos los caminos de mi mente para recordar tu imagen que se mezcla con mi deseo.